Chips flexibles más finos que un cabello. Es el último invento que llega desde China. Investigadores del país asiático han desarrollado estos dispositivos electrónicos que pueden combinarse con la tecnología Bluetooth. Tienen aplicaciones médicas, así como en campos como la comunicación, o el internet de las cosas, como recoge la agencia Xinhua.
Estos nuevos chips flexibles miden menos de 25 micrómetros de espesor; es decir, en torno a un tercio de lo que mide un cabello humano. Se presentaron en la 2.ª Conferencia Internacional sobre Electrónicos Flexibles, inaugurada el pasado sábado en Hangzhou, capital de la provincia de Zhejiang. En el evento participaron más de 600 expertos de distintos países.
De acuerdo con Feng Xue, líder del equipo y profesor de la Universidad Tsinghua, estos chips flexibles pueden amplificar señales analógicas. Asimismo, pueden integrar el procesar con la función inalámbrica Bluetooth. De hecho, una de las aplicaciones pensadas para estos dispositivos es la comunicación.
Según explicó el investigador, también se ha planteado usar estos chips flexibles en campos como los servicios médicos digitales, el internet de las cosas o la producción inteligente. En ese sentido, comentó que la tecnología electrónica flexible permite insertar materiales orgánicos e inorgánicos en sustratos flexibles y dúctiles.
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